Comunicado | A la comunidad de colegas y en general

Ante los hechos recientemente acontecidos en la provincia de Buenos Aires en torno al desmantelamiento de un importante grupo coercitivo con un saldo significativo de víctimas, nos pronunciamos públicamente en contra de dicha y toda organización que violente tanto a los individuos que las conforman como a sus garantías constitucionales, sirviendo a propósitos completamente alejados de aquellos valores e ideales propios de una sociedad justa, democrática y libre de todo tipo de violencias.

Entre las prácticas ejercidas por este grupo de personas, con el presunto propósito de “sanar” e “iluminar” a quienes recurrían a ellas, se mencionan desde el coaching ontológico hasta privaciones sistemáticas del sueño, sirviéndose asimismo de rituales propios de las sociedades orientales, pero ajustados a fines completamente alejados del profundo respeto hacia la dignidad humana.

Es por ello que incitamos a nuestros colegas, según los artículos 1, 2, 6, y 10 del Código de Ética Provincial, a tomar distancia de estas prácticas que carecen de fundamento científico o empírico), puesto que además de corresponder más al plano metafísico o espiritual e individual, representan en sí mismas un riesgo significativo para la población al utilizarse como tratamientos sanitarios, más allá de la buena fe a la hora de su aplicación en personas con padecimientos psicológicos. También alertamos a la comunidad sobre las mismas.

Siguiendo a su vez los artículos 70 y 75, desde el Colegio de Psicólogas y Psicólogos de Entre Ríos expresamos una grave preocupación, tanto por el ejercicio de estas prácticas ajenas a la ciencia y la excelencia profesional, como así también por el posible uso de técnicas idóneas y validadas, pero con intenciones de vulnerar y sacar provecho para beneficio propio.

En caso de sospechar un posible ejercicio o actividad de naturaleza sectaria (o de riesgo sectario), no duden en comunicarse con nuestro Colegio por las vías correspondientes.