Como siempre, nos es grato comunicarnos una vez más con ustedes, especialmente en estos momentos en donde la crisis ocasionada por la pandemia del COVID-19 nos ha exigido, y nos exige de un modo hasta hace poco impensado, superar condiciones personales y profesionales muy difíciles, que implican nuestro máximo esfuerzo personal y colectivo.
En efecto, como Comisión Directiva procuramos estar en permanente actualización de las novedades que se suscitan tanto en el ámbito de nuestra provincia, como en otras provincias hermanas, y en el ámbito nacional, a través de nuestra participación en la Fepra y otras organizaciones.
Diariamente tomamos nota sensible de la situación por la que atraviesan nuestros colegas, y en particular, de aquellos que dependen directamente de los ingresos generados en su actividad clínica privada, ya sea en modo directo o a través de obras sociales, sabiendo que es la modalidad de ejercicio de nuestra profesión que más se ha visto afectada por esta emergencia sin precedentes en la historia. El cierre de los consultorios y la imposibilidad de ofrecer procesos terapéuticos presenciales a consecuencia de decretos nacionales establecidos para el control de la crisis, han repercutido en forma directa y drástica en la facturación de cada uno de los matriculados. Sabemos también que en muchos casos es el ingreso principal para el sostenimiento económico, tanto del colega como de su familia. En particular, observamos con preocupación las imprevisibles consecuencias que se presentarán a partir de ahora y en los meses venideros, previendo que este imprevisto desequilibrio afecta en forma crítica a todos los sectores de la sociedad.
En tal situación, entendemos y compartimos la mayoría de las inquietudes y reclamos que tienen por objeto la consideración de la Comisión. Ya sea por medios escritos, como cartas o e-mails, o en forma telefónica, hemos estado atentos a las necesidades de todo el cuerpo de colegiados, procurando responder, en la medida de nuestras posibilidades y limitaciones presentes, con las mejores soluciones a nuestro alcance.
Lamentamos no poder convocarlos, en la presente situación, a una nueva reunión para desarrollar y profundizar todas las inquietudes profesionales que conciernen al Colegio, en especial las relacionadas al sistema previsional al que estamos sujetos por Ley, y a la situación respecto de las obras sociales con las que tenemos convenio.
Es de nuestro interés manifestarles que una vez concluido el período oficial de aislamiento social indicado por el Gobierno Nacional, la presente Comisión Directiva –siguiendo el espíritu de pluralidad y democracia que ha caracterizado al Colegio desde su fundación– continuará convocando a los colegas a participar de reuniones, en particular respecto de éstos dos temas de alta importancia, para evaluar en conjunto posibles cambios o mejoras a lo ya obtenido. Procuraremos, por nuestro lado, resaltar la convocatoria a las mismas, enfatizando la importancia de la participación de todos los afectados en las resoluciones que se tomen. Solicitamos a su vez a los interesados, que efectúen una reevaluación de su participación activa en estos temas, con la esperanza de que concluyan que es necesaria su presencia, comprometiéndose a integrar las mismas en la medida en que les sea posible. Entendemos que es una responsabilidad de todos lograr que en las reuniones haya, en un sentido literal, más de seis colegas convocados para tratar temas cuya delicadeza exige un mayor compromiso grupal.
Un detenimiento y observaciones específicas merecen la actual situación de crisis. Lejos de pretender evadir de algún modo la cuestión, hemos comunicado al colectivo cada acción que realizamos, cada logro obtenido. Somos plenamente conscientes de que son resultados insuficientes por escasos, ya que el cúmulo y la urgencia de las necesidades que se han presentado sobrepasa desmesuradamente a las numerosas acciones tomadas, dando a éstas últimas un matiz que podría confundirse con lo pálido, o con signos de debilidad, especialmente dentro de un contexto de emergencia declarada. Nuestras intervenciones en lo pertinente a la Caja de Previsión Social han sido constantes, con una participación de relevancia en las presentaciones realizadas en conjunto con otras profesiones nucleadas en la Asociación de Entidades Profesionales Universitarias de Entre Ríos (AEPUER), logrando que la Caja emita una Resolución (Nº 37/20), cuya esencia resuelve la suspensión de las obligaciones previsionales de junio y julio del presente año, pagaderas a diciembre del mismo año, junto a las deudas por falta de pago de cuotas anteriores.
No satisfechos con esta Resolución, y antes de recibir reclamo alguno por parte de nuestros matriculados, la Comisión Directiva decidió el envío de una nueva carta, esta vez remitida únicamente por el CoPER, destinada al Presidente de la Caja de Previsión, en donde explicamos claramente las diferencias que existen entre el promedio de ingreso mensual de un médico y el de un psicólogo, sea cual fuere su área de dedicación. Solicitamos en la misma que se incluyeran los meses de abril y mayo a lo resuelto en la Resolución Nº37/20, no obteniendo, a la fecha una respuesta.
De sostenerse esta situación, la Comisión evaluará una nueva presentación, ya que entendemos que la finalidad que perseguimos se encuentra sostenida por la coherencia acorde al presente momento que nos toca transitar. Debemos aclarar, no obstante, que ésta Comisión Directiva tiene por política solicitar lo posible y no lo ideal, ya que pugnar por aquello que de antemano sabemos impracticable no haría otra cosa más que atrasar negociaciones urgentes. Si bien consideramos que lo más coherente con la situación laboral que estamos atravesando todos sería la exención del pago de los meses mencionados, esto sería al momento una utopía. Son tiempos de ser estratégicos, insistiendo con nuestras necesidades antes quienes correspondan, pero sin desistir de las formalidades propias de una Institución. Sería un error confundir formalidad con tibieza. Debemos, del mismo modo, llamar a la reflexión de todo el colectivo, al solicitarles que evoquen una lógica reflexión de que, si simple y fácil fuese la cuestión, hace ya mucho tiempo las distintas comisiones habrían resuelto la difícil obligación de pago de la Caja de Previsión, aliviando así para todos los inconvenientes económicos que se generan por cumplir con la misma.
Nos encontramos a su vez con la lógica dificultad de transmitir al colectivo nuestro accionar con el nivel de detallismo que en ciertos casos se pretende. El lógico devenir y los vaivenes típicos de nuestra intervención como representantes gremiales y legales, en total acuerdo al Capítulo 3 de nuestro código de ética, en todos sus artículos, son obstáculos a la hora de transmitir con profundidad los aspectos que hacen a la evolución y resolución de una problemática. Es por esta misma razón que insistimos en la participación de los interesados, especialmente asistiendo a las reuniones prefijadas –en la mayoría de los casos por demanda misma de los colegiados-, convocadas por el Colegio. Invitamos nuevamente a los colegas a leer, ya sea en el sitio web, como en los sucesivos boletines semanales vía e-mail, los diversos comunicados que hemos redactado en el devenir del tiempo, animándolos una vez más a cultivar el hábito de hacerlo en el futuro. Hasta donde nosotros alcanzamos a discernir, el texto leído y/o la asistencia a las reuniones o Asambleas son los mejores medios para que los matriculados se interioricen del accionar de la Comisión Directiva y de las noticias que conciernen a nuestro colectivo en general.
Queremos aprovechar esta oportunidad para agradecer todas las manifestaciones de apoyo recibidas, en particular a los miembros de Comisiones Directivas anteriores que bien saben lo difícil que es representar a un colectivo, especialmente en momentos como éste, en donde la responsabilidad por la toma de decisiones que afectan a muchos es puesta a prueba con el máximo rigor.
También queremos mencionar especialmente a los y las colegas que han accedido voluntariamente a integrar la lista de profesionales que conforman esta nueva versión del SAC (Sistema de Atención Comunitaria, ya presente en el CoPER en otras situaciones de crisis y catástrofe). Su actitud desinteresada, compromiso social, y espíritu de vocación son dignas de ser resaltadas. Haberse manifestado inmediatamente en respuesta a una necesidad premente de la Nación y del pueblo entrerriano merece el mayor elogio. Nos estamos ocupando de que el dispositivo logrado sea utilizado por quienes lo necesitan del modo correcto, pese a que puede incluir algo de tiempo su plena implementación. Bregamos por que no falte oportunidad de agradecer vuestra participación en forma presencial.
La presente Comisión Directiva continuará, como es su costumbre, en su carácter de receptor y tramitador de los futuros reclamos y/o sugerencias que tengan por objeto tanto el bien común de todos los matriculados como lo que obedece al ámbito de lo particular, sin ninguna distinción en estos casos, tomando a todas las manifestaciones con el mismo grado de seriedad.
Saludamos a ustedes cordialmente, deseando que podamos confraternizar en un tiempo breve y en un contexto social más favorable al que vivimos en el presente.
Comisión Directiva
CoPER